Cosas veredes diciembre 2022

Luis de la Barreda Solórzano

Qatar: futbol y derechos humanos

“Espero visitar Qatar cuando haya cumplido con todas las promesas de derechos humanos que hizo cuando ganó el derecho a albergar la Copa del Mundo”, declaró Dua Lipa al negar que actuaría en la inauguración del campeonato Mundial de Futbol. Igualmente, Shakira rechazó la posibilidad de cantar en tal ocasión. Hoy admiro aún más a las dos estupendas y bellísimas cantantes.

No todas las figuras del espectáculo procedieron de manera similar. El gran actor Morgan Freeman pronunció en esa ceremonia un discurso de tolerancia, unión y respeto en un país donde la intolerancia, la desunión y el irrespeto dañan la vida de una parte considerable de la población. Maluma participó en el FIFA Fan Festival en la víspera, después de que cortó vergonzante y abruptamente una entrevista en la que se cuestionaba su participación. Sigue leyendo→


¿Discursos de odio?

Siglo XXI Editores canceló la presentación en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara de Cuando lo trans no es transgresor, de Laura Lecuona, que estaba prevista para el pasado lunes 28 de noviembre. El motivo fue que el anuncio de que ese libro sería presentado suscitó no sólo protestas, sino incluso amenazas tales como que se prendería fuego al stand de la editorial, y que los descontentos asistirían armados de bates con clavos, quemarían ejemplares e incluso ¡le dispararían a la autora!

El Colectivo DiversoUdeG publicó un comunicado en el que reconoce que la FIL es “un lugar donde las ideas se debaten y los diálogos se abren, donde la libertad de expresión encuentra un santuario”, pero advierte que “este derecho tiene un límite y ese límite es cuando lo que expresamos constituye un discurso de odio y daña la dignidad de las personas”. Cosas veredes. La comunidad LGBTQ+ ha sido discriminada, humillada y perseguida. En muchos lugares del mundo se sigue castigando penalmente a sus integrantes, incluso en algunos países con la pena de muerte. Es una cruel ironía que ahora sea un segmento de esa comunidad el que se ha vuelto persecutor. Sigue leyendo→

Qatar: futbol y derechos humanos

Por Luis de la Barreda Solórzano
24 de noviembre de 2022

“Espero visitar Qatar cuando haya cumplido con todas las promesas de derechos humanos que hizo cuando ganó el derecho a albergar la Copa del Mundo”, declaró Dua Lipa al negar que actuaría en la inauguración del campeonato Mundial de Futbol. Igualmente, Shakira rechazó la posibilidad de cantar en tal ocasión. Hoy admiro aún más a las dos estupendas y bellísimas cantantes.

No todas las figuras del espectáculo procedieron de manera similar. El gran actor Morgan Freeman pronunció en esa ceremonia un discurso de tolerancia, unión y respeto en un país donde la intolerancia, la desunión y el irrespeto dañan la vida de una parte considerable de la población. Maluma participó en el FIFA Fan Festival en la víspera, después de que cortó vergonzante y abruptamente una entrevista en la que se cuestionaba su participación.

Qatar es un muy rico y pequeño país —su población no llega a tres millones de habitantes y su superficie es menor que la de Querétaro— en el que se niega a las mujeres el derecho a tomar decisiones cruciales sobre sus propias vidas: necesitan autorización de sus tutores, varones de la familia, para casarse, estudiar o viajar al extranjero hasta cierta edad, trabajar en muchos de los empleos públicos o recibir tratamientos de salud reproductiva, incluidos los de infecciones de transmisión sexual y la profilaxis posterior a una exposición al VIH. Para tener acceso a esos tratamientos, además, debe presentarse el certificado de matrimonio.

El delito de zina —acto sexual de una persona casada realizado fuera de matrimonio, por el que se castiga, con fundamento en la ley de la sharía, solamente a los musulmanes— es punible con la muerte. La pena para los no musulmanes es de hasta siete años de prisión. A los solteros que tienen relaciones sexuales se les inflige flagelación.

La denuncia de violación presentada por una mujer llega a considerarse confesión del delito de coito extramarital. Las autoridades descreen de la versión de las mujeres. Les basta para desestimarlas con que el varón denunciado afirme que la cópula fue consentida. Cualquier indicio de que la mujer lo conocía basta para condenarla. Es el caso de la mexicana Paola Schietekat, procesada por denunciar que fue violada.

Instigar a un varón a un acto de sodomía o inmoralidad se sanciona hasta con tres años de cárcel. Un embajador de la Copa Mundial declaró que la homosexualidad es una desviación mental y que los homosexuales podrían asistir a los partidos siempre y cuando no se dieran muestras de afecto.

Como Qatar carecía de la infraestructura indispensable para el magno torneo —estadios, ampliación del aeropuerto y del metro, hoteles—, se contrató a una gran cantidad de trabajadores migrantes que fueron víctimas de múltiples abusos: hacinamiento, falta de higiene y de seguridad en las habitaciones; retención del pasaporte; amenazas de deducciones en el pago o de entrega a la policía para expulsión del país en caso de negarse a jornadas excesivas. Las cifras de trabajadores muertos que se han dado a conocer son muy distintas. The Guardian calcula que fueron 6,500.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, sentenció que las críticas europeas al régimen catarí son hipócritas: deberíamos pedir perdón —dijo— por los últimos 3,000 años antes de dar lecciones morales. Pero Infantino sabe que no se puede cambiar el pasado. Ningún país está libre de culpa, pero no es útil el arrepentimiento por los abusos de generaciones anteriores. Lo primordial es que esos abusos, que la honestidad obliga a reconocer, no se perpetúen o se repitan. Las violaciones a derechos humanos que ocurren hoy hay que denunciarlas y combatirlas hoy, sin que para hacerlo nos detenga el recuerdo de las culpas de nuestros antepasados. Al contrario: la rememoración debe ser incentivo para abatirlas.

Disfruto del Mundial y admiro las actitudes de la Selección Australiana, que pidió al gobierno catarí que despenalice las relaciones homosexuales; de la Selección Inglesa, cuyos jugadores pusieron una rodilla en tierra antes de su primer partido como gesto de denuncia de las violaciones a los derechos humanos en el país sede, y de los jugadores iraníes, que se abstuvieron de cantar su himno nacional en solidaridad con las mujeres reprimidas por la dictadura de ayatolas que los gobierna.

Fuente:
https://www.excelsior.com.mx/opinion/luis-de-la-barreda-solorzano/qatar-futbol-y-derechos-humanos/1554465
(29/11/22)

¿Discursos de odio?

Por Luis de la Barreda Solórzano
1 de diciembre de 2022

Siglo XXI Editores canceló la presentación en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara de Cuando lo trans no es transgresor, de Laura Lecuona, que estaba prevista para el pasado lunes 28 de noviembre. El motivo fue que el anuncio de que ese libro sería presentado suscitó no sólo protestas, sino incluso amenazas tales como que se prendería fuego al stand de la editorial, y que los descontentos asistirían armados de bates con clavos, quemarían ejemplares e incluso ¡le dispararían a la autora!

El Colectivo DiversoUdeG publicó un comunicado en el que reconoce que la FIL es “un lugar donde las ideas se debaten y los diálogos se abren, donde la libertad de expresión encuentra un santuario”, pero advierte que “este derecho tiene un límite y ese límite es cuando lo que expresamos constituye un discurso de odio y daña la dignidad de las personas”. Cosas veredes. La comunidad LGBTQ+ ha sido discriminada, humillada y perseguida. En muchos lugares del mundo se sigue castigando penalmente a sus integrantes, incluso en algunos países con la pena de muerte. Es una cruel ironía que ahora sea un segmento de esa comunidad el que se ha vuelto persecutor.

En una sociedad democrática las ideas se combaten con ideas, con argumentos, con refutaciones, no con amenazas ni con censura. Hay individuos y grupos que en realidad no son partidarios de la libertad de expresión, a la que atacan cuando quien la ejerce no piensa como ellos. ¡Qué paradójico que quienes se abstienen de condenar que se conmine la divulgación de un ensayo con quema de stand y de libros, agresiones físicas y aun disparos contra la autora acusen discurso de odio en una obra que no ha sido publicada, como si tales advertencias fueran discurso de concordia y tolerancia! Nada se utiliza de manera más tramposa y sectaria que la acusación de discurso de odio, el cual frecuentemente es atribuido por determinados individuos o grupos a quienes critican sus ideas, en tanto que sus críticas a las ideas de sus adversarios son, en cambio, justificada desaprobación.

Recientemente, la editorial mexicana Almadía canceló los contratos que tenía con la escritora colombiana Carolina Sanín, por lo que no publicará sus obras Somos luces abismales y Tu cruz en el cielo desierto. La razón es el cuestionamiento que la escritora ha hecho a lo que llama el dogma de género y al transactivismo. “Firmaron el contrato e incluso pagaron el anticipo, de modo que nada tiene que ver con el contenido de los libros. Se trata de la cancelación de la persona”, señala la novelista.

Carolina Sanín ha abordado en varios textos las tensiones entre el transactivismo y el feminismo, aclarando que su motivación no es quejarse, sino explicar sus intuiciones y preguntas. Sostiene que no tiene fobia alguna contra las personas trans, pero que la imposición de una ideología sumada a la intimidación de la muchedumbre es propia de los fanatismos.

No hace mucho se acusó de transfobia y se anatematizó a J. K. Rowling, nada menos que la creadora de Harry Potter, a quien, a pesar de que expresó que respeta el derecho de las personas trans de vivir de cualquier manera que sientan como auténtica y cómoda, no se le perdona en círculos del activismo trans que haya expresado las obviedades de que a las mujeres debe llamárseles mujeres y no “personas menstruantes” y que el sexo biológico es real y no una ilusión.

Rechazar opiniones, conductas, ideologías, doctrinas o militancias no es incurrir en discurso de odio. Lo es animar a agredir, discriminar o humillar a determinadas personas (homosexuales, transexuales, judíos, mujeres, musulmanes, pobres, ricos, aspiracionistas y un larguísimo etcétera). Hay ideas detestables, pero, desde luego, toda persona debe ser respetada.

Pero el chantaje tuvo éxito, no sólo por lograr que se cancelara la presentación de Cuando lo trans no es transgresor. Siglo XXI decidió posponer ad infinitum su publicación, por lo que Laura Lecuona acordó con la editorial que el libro ya no se publicase bajo su sello y hará una edición de autora. Los ejemplares podrán solicitarse al correo disentirnoesodio@gmail.com. Inaudito e indignante: triunfó el fanatismo, el bullying, la neoinquisición. Y seguirá triunfando si no hay quienes los enfrenten con la valentía y el coraje con que lo ha hecho Laura.

Fuente:
https://www.excelsior.com.mx/opinion/luis-de-la-barreda-solorzano/discursos-de-odio/1555954
(1/12/22)