Este lunes ha arrancado en Ginebra la 108 Conferencia Internacional del Trabajo, que se enmarca en el contexto del centenario de la Organización Internacional del Trabajo. Aprovechando este aniversario redondo, el director general de la Organización prometió que, este año, la Conferencia será diferente a las anteriores.
“Será diferente porque sus decisiones deben decir al mundo que tenemos la confianza, el propósito común, la voluntad y los medios para construir un futuro del trabajo con justicia social para todos. Lo haremos porque el trabajo no es una mercancía. Lo haremos porque las condiciones de trabajo con injusticia y privaciones ponen en peligro la paz del mundo”, aseguró Guy Ryder. Sigue leyendo