Luis de la Barreda Solórzano
Lo de menos es que el decreto publicado en la edición vespertina del Diario Oficial de la Federación del 23 de abril abunde en la retórica tan cara al Presidente, incurra en lugares comunes, incluya la consabida declaración de fe contra el neoliberalismo y padezca una redacción deplorable. Lo inadmisible son sus despropósitos jurídicos. Parece claro —tenebrosamente claro— que al consejero jurídico, Julio Scherer Ibarra, no se le dan la escrupulosidad legal ni el talento estilístico.
El documento contiene las firmas del Presidente y los secretarios de Gobernación, Hacienda y la Función Pública. Me pregunto qué habrá sentido la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien, como ministra de la Suprema Corte, tuvo la misión de velar por que las autoridades observaran la Constitución y las leyes que de ella emanan, si no se le habrá estremecido un poquito la conciencia, al rubricar un decreto de esa índole. Sigue leyendo→