19 de febrero de 2024
- Más de medio millón de personas ingresaron a Costa Rica desde Panamá en 2023. Las Naciones Unidas trabajan en conjunto con el Gobierno para atender necesidades básicas de alojamiento, salud e higiene de personas en tránsito y asegurar el trato digno, humano y enfocado en proteger los derechos de los migrantes y refugiados.
Ana es una mujer venezolana en busca de una mejor vida para ella y su familia. Decidió emprender el camino hacia el norte y arriesgar su vida para intentar tener un “futuro con dignidad” en donde sus hijos puedan estudiar, comer y jugar en paz.
“Cuando vinimos a Costa Rica todo fue diferente. Pasamos el Darién, vimos gente morir, lo perdimos todo, pero al llegar aquí nos sentimos personas de nuevo, porque nos pudimos bañar, tuvimos ropa limpia, comimos, los niños jugaron, el doctor me atendió”, contó la mujer a Noticias ONU.
Esta familia llegó al Centro Temporal de Atención de Migrantes, cerca de la frontera sur con Panamá. Se trata de un espacio en el que las personas en tránsito hacen trasbordo para continuar su viaje, o bien esperan mientras reúnen los recursos para seguir. Allí reciben atención psicosocial y médica, información, alimentos, ropa, alojamiento digno e insumos de higiene y primera necesidad.
El Centro es gestionado por la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica y apoyado por las Naciones Unidas en el día a día.
Un apoyo imprescindible para los migrantes y refugiados
El 2023 batió todos los récords en materia de movilidad humana y Ana es parte del más de medio millón de personas que ingresaron a Costa Rica desde Panamá ese año. Este número representó un incremento de un 133% respecto al año anterior.
A su entrada a Costa Rica, el 87% de este flujo de personas indicó que procedía de Venezuela, pero también se registraron personas de Colombia, Ecuador, Haití y extracontinentales procedentes de China y varios países de África. Al menos 100.000 eran niños, niñas y adolescentes.
A pesar de este incremento sin precedentes, las estimaciones iniciales consideran que el flujo de este año podría duplicar el de 2023.
Plan de Respuesta de la ONU
Para apoyar a Costa Rica y a las personas a enfrentar esta realidad, la ONU presentó el nuevo Plan de Preparación y Respuesta para Personas en Tránsito 2024.
Se trata de un conjunto de acciones para apoyar al gobierno y fortalecer el abordaje y asistencia integral de las personas refugiadas y migrantes que se encuentren en situación de vulnerabilidad en el territorio costarricense.
“Este ambicioso proyecto, forjado bajo los robustos principios humanitarios y de protección, y la consigna de una migración segura, ordenada y regular, refleja el compromiso irrevocable del Sistema de Naciones Unidas de apoyar al Estado costarricense cuando la situación de necesidad así lo demanda, y con el fin de garantizar, tanto como sea posible, el bienestar de cada individuo que, afectado por alguna situación crítica, ha tomado la desesperada decisión de abandonar su hogar”, manifestó la coordinadora residente de la ONU en Costa Rica, Allegra Baiocchi.
El Plan establece los objetivos comunes de las agencias de la ONU en Costa Rica. Entre los organismos se encuentran el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la Organización de las Naciones Unidas dedicada a promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres (ONU Mujeres) y la Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
Las acciones que se desprenden de estos objetivos se realizan en apoyo al trabajo de las instituciones del Estado y organizaciones de la sociedad civil.
Las áreas de atención definidas en el plan incluyen: la provisión de alojamiento, asistencia alimentaria, provisión de agua, saneamiento e higiene, acceso a la salud y educación, protección, retornos, integración, gestión de información y comunicación, fortalecimiento de la coordinación, entre otros.
Proteger los derechos de los migrantes y refugiados
Para el Gobierno de Costa Rica, el trabajo conjunto con la ONU y otros entes regionales es clave para asumir los compromisos y asegurar el trato digno, humanitario y enfocado en proteger los derechos de las personas migrantes y refugiadas.
“En un mundo interdependiente, la capacidad de trabajar en equipo se vuelve no solo deseable sino imprescindible, destacando la necesidad de construir alianzas sólidas y promover la solidaridad entre naciones para enfrentar los retos contemporáneos con eficacia y justicia”, manifestó el ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica.
Arnoldo André Tinoco señaló que, en esa línea, el país asume este año la Presidencia Pro Tempore del Proceso de Quito. “Seguimos abogando por más acciones en el Marco Integral Regional para Protección y Soluciones y en la Conferencia Regional sobre Migración”, añadió.
En este sentido, André Tinoco declaró que la presencia del Sistema de las Naciones Unidas y la comunidad internacional, así como de los socios cooperantes, es esencial. “Juntos, podemos tejer una red más fuerte de solidaridad y colaboración que trascienda fronteras”.
Enfoque regional y colaborativo
Como parte de la respuesta y atención al flujo de personas en tránsito en Costa Rica, Naciones Unidas y sus agencias brindaron asistencia a más de 84.000 personas en 2023. Se les proporcionó asistencia médica, asesoría legal migratoria, información sobre obtención de documentos y casos de retorno voluntario, asistencia alimentaria, kits de higiene y atención en espacios seguros.
“Desde Naciones Unidas reafirmamos nuestro compromiso con Costa Rica, su Estado e instituciones que solidariamente han dado atención humanitaria y apoyado el cumplimiento de los derechos de más de medio millón de personas que han emprendido un camino en búsqueda de un mejor presente y futuro para ellos y sus familias”, destacó Allegra Baiocchi.
“Ningún país de las Américas puede responder con eficacia a los desafíos de la movilidad humana por sí solo. La ONU alienta a los Estados a practicar un enfoque regional integral y colaborativo, y reitera su apoyo continuo a las respuestas que aborden las obligaciones humanitarias internacionales y la gestión de una migración segura, ordenada y regular”, finalizó.
Fuente:
https://news.un.org/es/story/2024/02/1527792
(29/2/24)