El Acuerdo de Escazú y su Implementación en el SNEDH: Un Paso hacia la Justicia Ambiental

Amilcar Paris Mandoki*

Palabras clave: Acuerdo de Escazú, derechos ambientales, indicadores clave, futuro sostenible

En el corazón de Costa Rica, en la ciudad de Escazú, un grupo de líderes se reunió con un propósito común: garantizar que cada persona tuviera acceso a un medio ambiente sano y sostenible. Así nació el Acuerdo de Escazú el 4 de marzo de 2018, un tratado regional pionero que no solo busca proteger el entorno natural, sino también empoderar a las comunidades mediante el acceso a la información, la participación pública y la justicia en asuntos ambientales. Este acuerdo es un hito en la protección de los derechos ambientales y humanos, y representa el compromiso de los países signatarios para fortalecer la gobernanza ambiental y proteger a los defensores del medio ambiente.

El Nacimiento del Acuerdo de Escazú

El Acuerdo de Escazú, firmado en 2018 en Costa Rica, representa un gran logro en la historia de la gobernanza ambiental en América Latina y el Caribe. Se centra en cuatro pilares fundamentales:

  • Acceso a la Información Ambiental: Garantizar que todas las personas tengan acceso a datos claros y precisos sobre el estado del medio ambiente.
  • Participación Pública: Fomentar la inclusión de la sociedad en la toma de decisiones que afectan su entorno.
  • Acceso a la Justicia: Asegurar que las personas puedan recurrir a instancias legales cuando sus derechos ambientales sean vulnerados.
  • Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos: Establecer medidas para garantizar la seguridad de quienes defienden los derechos ambientales, previniendo ataques y represalias en su contra.

El Sistema de Indicadores del Acuerdo de Escazú

Para monitorear el progreso de estos objetivos, se desarrolló un sistema de indicadores que se integró al Sistema Nacional de Evaluación de Derechos Humanos (SNEDH) en México. Este sistema no solo mide el avance de las políticas ambientales, sino que también sirve como base para diseñar políticas públicas y rutas de acción.

Indicadores Clave

Para evaluar el progreso y la efectividad de las políticas ambientales en México, es fundamental contar con un sistema de indicadores robusto y detallado. Estos indicadores permiten medir aspectos clave del desempeño ambiental y la implementación de los principios del Acuerdo de Escazú. A continuación, te presentamos ejemplos de los indicadores más relevantes que reflejan el compromiso del país con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente.

Existencia de una Política Ambiental Aprobada

La política ambiental vigente en México es el Programa Sectorial de Medio Ambiente y Recursos Naturales 2020-2024, que es un ejemplo claro de este compromiso. Este programa tiene objetivos prioritarios como la conservación de ecosistemas, la acción climática y la promoción de un entorno libre de contaminación. Estos objetivos reflejan un esfuerzo concertado por parte del gobierno mexicano para alinearse con los principios del Acuerdo de Escazú, promoviendo una gobernanza ambiental inclusiva y participativa.

Tasa de Mortalidad por Contaminación del Aire

Este indicador mide el número de muertes por cada 100,000 niños menores de 5 años en un año específico. En el periodo de 2010 a 2020, se observa una disminución constante en la tasa de mortalidad por enfermedades respiratorias agudas en niños menores de 5 años. En 2010, la tasa era de 23.85 por cada 100,000 habitantes, y para 2020, la tasa de mortalidad se redujo a 12.62 por cada 100,000 habitantes. Este descenso refleja mejoras en la atención médica y prevención de enfermedades respiratorias en esta población vulnerable.

Este indicador es crucial en el contexto mexicano, ya que refleja la efectividad de las políticas de salud pública y la calidad de los servicios médicos. Las enfermedades respiratorias agudas son una de las principales causas de mortalidad infantil, y su monitoreo permite identificar áreas de mejora en la atención médica, la prevención y la educación sanitaria. Además, ayuda a evaluar el impacto de las campañas de vacunación y otras intervenciones preventivas, contribuyendo a la formulación de estrategias para reducir la mortalidad infantil y mejorar la salud de los niños en México.

La Lucha contra los Delitos Ambientales

El sistema también monitorea la incidencia delictiva contra el medio ambiente. Entre 2010 y 2020, México registró una disminución en la tasa de delitos ambientales, pasando de 1.33 a 0.39 delitos por cada 100,000 habitantes. Esta reducción refleja los esfuerzos del país por fortalecer la gobernanza ambiental y la aplicación de la ley. Sin embargo, también plantea preguntas sobre la efectividad de las medidas preventivas y la necesidad de una vigilancia continua para asegurar que los delitos ambientales no queden impunes.

Un Futuro Sostenible

La implementación de estos indicadores en el SNEDH no solo permite un seguimiento transparente y uniforme del Acuerdo de Escazú, sino que también establece un precedente para otros países de la región. Al adoptar un enfoque basado en derechos humanos, México se posiciona como un líder en la protección del medio ambiente y la promoción de la justicia ambiental. En última instancia, el Acuerdo de Escazú y su integración en el SNEDH representan un paso significativo hacia un futuro donde todas las personas puedan vivir en un entorno sano y sostenible, con la certeza de que sus derechos serán protegidos y respetados.


* Consultor de la Unidad de Indicadores del Programa Universitario de Derechos Humanos de la UNAM.